Antecedentes Históricos de la Teoría Administrativa
La
Administración existe desde
el momento en
que el hombre
debió satisfacer sus necesidades para lo cual debió
administrar los recursos para subsistir. Es por ello que los antecedentes
históricos de la administración son infinitos y existen desde que el hombre es
hombre.
La primera definición de administración fue
elaborada en 5000 a.C. por los sumerios
quienes
fueron además la
primera civilización conocida
que registró las
operaciones
comerciales. Dos mil cuatrocientos años más tarde,
los egipcios fueron pioneros en lo que
respecta a descentralización del mando y las
actividades.
El primer concepto reconocido de organización fue
elaborado por los hebreos cerca de
1491 a.C., mientras que Nabuconodosor, rey del
imperio babilónico, fue el primero en
incentivar a sus subordinados (principalmente
militares y campesinos) mediante el salario.
En el imperio japonés, el comandante Sun Tsu
(primer autor de estrategia militar de la
historia) reconoció en su obra “El Arte de la
Guerra” la necesidad de planear, dirigir y
controlar, lo cual es una premisa muy importante
hasta nuestros días. Por otra parte; el
militar, historiador y filósofo griego Jenofonte
desarrolló la idea de que la administración es
un arte separado. Aproximadamente en 400 a.C., Ciro
“el grande de Persia” reconoció la
necesidad de las relaciones humanas y el estudio de
los materiales para hacer más eficiente
el trabajo.
El método de la partida doble de la administración
contable fue creado en 1340 por L.
Pacioli mientras que los hermanos Soranzo iniciaron
el uso del libro diario y mayor. Años
más tarde, en 1776, el “padre de la economía” Adam
Smith transmitió a los trabajadores
manufactureros el principio de especialización y
control para poner en práctica lo que otros
sólo habían desarrollado teóricamente. Por su parte
Robert Owen esbozó la necesidad de
prácticas (relaciones de personal reconocido y
aplicado) además de capacitar al personal y
brindarle mejores condiciones de trabajo a los
obreros.1
Todos
estos antecedentes sumados
a una enormidad
de experiencias y
postulados
formulamos con anterioridad fueron la base de la
que partieron los pensadores clásicos de
la Administración para desarrollar su trabaj